Forestales al ritmo de la Celulosa.

Chile ya les quedó chico a Empresas Copec y CMPC. Ambas compañías son protagonistas en el mercado mundial: el grupo Angelini con Arauco, su brazo forestal, es el principal productor de celulosa -junto a la norteamericana Weyerhauser- y los Matte, quintos con la Papelera.

Por eso se espera que las fuertes utilidades que obtuvieron en los primeros nueve meses del año, básicamente por el precio récord que ha registrado la celulosa, el mayor en los últimos cinco años, las destinen a proyectos más allá de nuestras fronteras. ¿La razón? A nivel nacional no hay suficiente masa forestal para emprender proyectos de la envergadura de Nueva Aldea (Celco) o la ampliación de Santa Fe (CMPC).

Copec, a través de Celulosa Arauco (Celco), está negociando una alianza con la finlandesa Stora Enso que le permitirá aumentar su apuesta por el mercado brasileño, en el que tiene una fuerte presencia comercial y donde cuenta con dos plantas de tableros y 35 mil hectáreas de plantaciones. De prosperar el acuerdo no sólo incrementará su patrimonio forestal-la finlandesa tiene 30 mil hectáreas productivas en el estado de Paraná-, sino que sumará un aserradero.

La situación es diferente en CMPC, pues bajó sus ganancias respecto a enero-septiembre de 2005, impactadas por el menor tipo de cambio y los mayores costos de energía ya que no es autosuficiente como Arauco.

La compañía de los Matte está terminando un potente plan de inversiones que partió en 2004 e involucró US$ 1.500 millones. Estos se orientaron a aumentar la capacidad en todas sus áreas de negocios: celulosa, productos de papel y paneles, donde lo más relevante fue la ampliación de la planta Santa Fe (celulosa) que demandó US$ 745 millones. "Esto le generó un fuerte aumento en sus flujos que se notaría a partir de 2007", comenta Rodrigo Andaur, gerente de Estudios de Fit.

Pero el importante desembolso de recursos que hizo durante el último trienio obligaría a CMPC, estiman algunos analistas, a destinar parte de las utilidades de este año a hacer caja. Tampoco se descarta que aumente su operación en Uruguay o Argentina donde cuenta con bosques y plantas productivas.