Río Itata ya esta recibiendo contaminación.

Esta fotografía publicada por el diario La Discusión muestra como desde la Planta de la empresa Belga Orafti se evacuan desechos líquidos hacia el río Relbún.

Esta empresa se instaló en el Fundo San Pedro, 38 kilómetros al sur de Chillán por la ruta 5 Sur, justo al lado del peaje. Orafti es una empresa dedicada a la producción y comercialización de ingredientes alimenticios. Esta empresa es subsidiaria de Refinería Tirlemontoise, la más importante procesadora de remolacha en Bélgica y perteneciente, a su vez, a Südzucker, Alemania, primeros procesadores de remolacha y líderes europeos en el mercado del azúcar.

En Chile basa su producción de inulina y oligofructosa a partir del cultivo de "achicoria" que es una planta similar a la remolacha, pero más alargada y con mayores exigencias técnicas en su cultivo y posterior cosecha. Obviamente no es la conocida achicoria para ensaladas.

Según la empresa, el proceso de producción es en base a productos naturales sin utilizar "elementos químicos riesgosos".

A pesar de ello, vecinos cercanos a la empresa, de los sectores de General Cruz, San Miguel Bajo y San Miguel Alto han alzado la voz y reclaman por unos pestilentes olores que emanan de dicha industria, además de una notoria contaminación del Río Relbún (en la foto), que aguas abajo es tributario del Río Itata.

Estos olores, según los afectados, son similares a los de una letrina, por lo que no es para nada agradable respirar todo el día dichos aromas.

Orafti ha invertido cerca de 210 millones de dólares y, según sus ejecutivos, seguirá invirtiendo para mejorar sus procesos. Por ello en los próximos días sus efluentes comenzarían a ser tratados mediante un sistema biológico de degradación completa de la materia orgánica, eliminando el hedor de las descargas al Río Relbún.

Lo mismo ocurriría con los olores, que deberían declinar hasta ser imperceptibles. Dichos ejecutivos indicaron en una entrevista a La Discusión que debido a que "el proceso es en base a productos naturales, los olores percibidos no contienen elementos tóxicos que dañen la salud de las personas o afecten el entorno natural. Sin embrago pueden generar molestias".

Así las cosas, el Río Itata ya está recibiendo contaminación industrial, la que de iniciar labores la industria de celulosa de celco, será incrementada enormemente, ojalá sin repetir los enormes daños ocurridos en Valdivia al Santuario de la Naturaleza, a pesar que sus ejecutivos también indicaron que contaban con tecnología de punta y que todos los procesos estaban bajo control. (?)