Celco alista marcha blanca de Nueva Aldea

Pese a los renovados cuestionamientos a su planta Valdivia, la compañía ultima los detalles para estrenar el nuevo complejo.

Sólo restan días para que Celulosa Arauco (Celco) comience a operar en período de "puesta en marcha" su nuevo complejo de celulosa Nueva Aldea, emplazado en la Región del Biobío (VIII), y que requirió una inversión de US$ 1.400 millones.

Por estos días se están realizando pequeños ajustes que permitirían que, inicialmente, la próxima semana se pueda comenzar a sincronizar los equipos y a utilizar material forestal, con el fin de analizar el comienzo de la producción de la primera tonelada de celulosa.

Este avance se da justo en momentos en que se han renovado los cuestionamientos a la planta Valdivia en la X Región -que en 2005 cerró sus operaciones durante dos meses por problemas medioambientales- y en que el Gobierno, a través de la ministra Veloso, propuso una mesa de diálogo -entre el Gobierno, la empresa y la comunidad-, con el objetivo de superar las diferencias para la construcción del ducto al mar para la descarga de residuos de la planta.

Sin embargo, desde la compañía del grupo Angelini esta idea genera resistencia.

Argumentan que se trata de una instancia que está fuera de la institucionalidad que debe seguir el proceso de estudio de impacto ambiental del ducto, y que se pasaría a llevar la legalidad.

Esta opinión ha sido respaldada por otros empresarios, como el gerente general de la siderúrgica Gerdau Aza, Hermann von Mühlenbrock. "En términos personales, creo que cuando hay una ley, hay que cumplirla, por lo tanto, la compañía tiene el derecho pleno de hacer mediciones. No me parece que sea el camino correcto", señaló ayer, luego de participar el jueves pasado en la reunión de empresarios con la Presidenta Bachelet y algunos ministros en el CEP.

El tema fue analizado durante la mañana de ayer en las oficinas de Avenida El Golf 150 por la plana ejecutiva de Celco, y se decidió mantener un bajo perfil sobre el tema, por ahora, hasta ver cómo decanta esta idea del Gobierno, aunque no se piensa aún en conversar. Es que para la firma el tema pasa porque el Estado sea capaz de garantizar que ésta podrá realizar las mediciones necesarias para el estudio de impacto ambiental del ducto -que debe presentar el 7 de abril de 2007-, y que no será ahuyentada por los balazos de los pescadores de Mehuín.

Por ello, fuentes de la compañía creen que no estarán en condiciones de presentar el EIA en esa fecha, debido a que no han podido completar los estudios de los corrientómetros (para medir las corrientes marinas) que deben hacer tanto en invierno como en verano.

Y tampoco existe claridad sobre cuánto plazo adicional solicitar, dicen. "Si uno va a pedir una prórroga debe ser con una proposición, con un plan. ¿Cuánto vamos a pedir? ¿6 meses? ¿Un año? ¿Qué hace una empresa si no se pueden hacer las mediciones? Si no se pueden hacer en diciembre ¿pedimos dos años? El Estado debe dar la garantía para hacer las mediciones", dicen desde la compañía.

Publicado en www.economiaynegocios.cl (Sábado, 26 de Agosto de 2006)